vialibre 20/11/2025
El robo de carga en México sigue siendo un problema que afecta a la seguridad de las cadenas logísticas en el país. De acuerdo a Overhaul, líder global en gestión de riesgos en la cadena de suministro, durante el tercer trimestre de 2025 se mantuvo la concentración regional de este delito, lo cual representa un desafío constante para transportistas, empresas y autoridades en la búsqueda de soluciones efectivas.
Durante este periodo, de acuerdo con el Sistema Nacional de Seguridad Pública, el 82% de los robos a transportistas implicaron alguna forma de violencia, lo que destaca la seriedad y el riesgo que enfrentan los operadores en el día a día. Este porcentaje evidencia la necesidad de estrategias que no solo busquen reducir el número de incidentes, sino también proteger la integridad física de quienes trabajan en el transporte de carga.
Geográficamente, el problema se concentró en las regiones centro y sureste del país, que acumularon el 79.3% de los robos reportados. A pesar de esto, destaca el hecho de que estas regiones (consideradas el cuarto cuadrante), experimentaron una disminución de 6.2 puntos porcentuales en la incidencia delictiva, al pasar del 85.5% al 79.3%, lo que indica un ligero cambio en la dinámica espacial del delito.
Los estados con mayor incidencia son:
Puebla y Estado de México, que suman juntas cerca del 41% del total nacional.
Guanajuato, San Luis Potosí, Michoacán, Veracruz, Tlaxcala y Nuevo León, mostraron incrementos significativos, lo que indica un desplazamiento de la actividad delictiva hacia nuevas zonas, ampliando el mapa de riesgo para la industria logística.
Patrón geográfico y de horario para robos
El factor temporal también juega un papel determinante, el 86% de los robos ocurrieron entre lunes y viernes, siendo el martes el día con mayor índice de incidentes (20%). La mayor concentración se da en horarios nocturnos, de las 18:00 hasta las 06:00 horas, periodo en el que se cometieron el 52% de los incidentes, seguido del horario matutino, entre las 06:00 y las 12:00 horas. Durante el día, se identificaron dos picos: uno entre las 04:00 y 10:00 horas y otro entre las 20:00 y 23:00 horas, momentos en los que la vigilancia y la precaución deben incrementarse para reducir el riesgo.
Frente a este escenario, la colaboración entre empresas, asociaciones y autoridades se ha convertido en una pieza clave para mejorar la seguridad. Las alianzas estratégicas que permiten el intercambio de inteligencia accionable facilitan la aplicación de medidas preventivas focalizadas, como el reforzamiento de la vigilancia en puntos críticos, la implementación de tecnologías de rastreo y la capacitación constante de operadores.
Los expertos de Overhaul mencionan que entre las mejores prácticas se encuentra la creación de una cultura de seguridad dentro de las organizaciones, donde la atención y el cumplimiento de los protocolos son tan importantes como la puntualidad en las entregas. Además, la combinación de tecnologías accesibles, como el GPS, las cámaras de vigilancia, los sensores y las alertas de ruta, contribuye a reducir las oportunidades de robo y a obtener pruebas para la recuperación y sanción.
A pesar de los avances, la seguridad en las carreteras mexicanas requiere aún de mayor innovación y colaboración pública-privada para atender las limitaciones actuales. Empresas líderes han demostrado que invertir en seguridad no es un gasto, sino una ventaja competitiva que protege el negocio y fortalece la confianza del cliente.